Culiacán, Sinaloa. Además del Ómicron, el dengue es el otro problema de salud pública que enfrenta Sinaloa, que reporta 4 mil 518 casos y 11 defunciones, informó el gobernador Rubén Rocha Moya.

El mandatario se refirió también al diagnóstico de los campos agrícolas y dijo que se ha empezado en Villa Juárez, debido al campanazo que representó para el gobierno el feminicidio de una niña durante los últimos días de diciembre pasado.

Rocha Moya reconoció el marcado repunte de casos de Covid en la entidad, lo cual ocasionó que Sinaloa pasara del semáforo verde al amarillo y se corre el riesgo de que a finales de enero se retroceda al color naranja.

Con todo esto, el gobernador insistió en que se hacen esfuerzos en la adquisición de pruebas de laboratorio, para ser aplicadas en forma gratuita a las personas con los síntomas del Covid.

En este sentido, hizo un llamado a los empresarios y dueños de laboratorio a bajar los precios de las pruebas de coronavirus.

Destacó que la acción más efectiva para frenar la cuarta ola de contagios es la vacunación, que en Sinaloa lleva un avance del 92 por ciento, y esta tarde llegará un cargamento con 70 mil dosis que serán aplicadas como refuerzo a los trabajadores de la educación a partir del miércoles.

En cuanto al dengue, advirtió que Sinaloa aparece en los primeros lugares con una incidencia de 4 mil 518 casos registrados, 1 mil 616 confirmados, 1 mil 017 catalogados como no graves, 511 con síntomas de alarma, 88 son considerados casos de gravedad y suman ya 11 defunciones de personas.

Enrique Rodríguez