Culiacán. La industria restaurantera de Culiacán, que comprende alrededor de más de 2 mil negocios afiliados a Canirac, es uno de los sectores más golpeado por la pandemia del Coronavirus con el cierre de locales y despido de personal, luego de que se vieron obligados a cerrar en los primeros meses de la contingencia sanitaria, sumado al cero apoyo económico de los tres niveles de gobierno, que los dejaron 'morir solos', afirmó Miguel Taniyama, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac) en Culiacán.
Sobre ello, explicó
"Tenemos que alzar la voz que no hay los apoyos suficientes de ninguno de los tres niveles de gobierno, lejos de acordar estrategias en conjunto la realidad es que apoyos económicos, de planeación estratégica, de negocios, o de flujos no hay; vienen meses complicados no se visualiza que tengamos una solución a corto plazo. Hemos tocado puertas en Hacienda, Desarrollo Económico, Turismo, Ayuntamiento de Culiacán, y la realidad es que en ninguno de los tres niveles de gobierno tiene disposición de ver el como sí.
"En el tema del rescate no solo de la industria restaurantera, sino de los diversos sectores económicos, en el tema financiero, los bancos han cerrado las puertas, hay incertidumbre en el tema de pagos de créditos que se solicitaron, hay una inmovilidad impresionante. Y lamentablemente, llevamos 250 restaurantes y sucursales cerrados en la ciudad, afiliados en Canirac y llevamos perdidos alrededor de 4 mil empleos", sentenció el chef.
En tanto, desde que este sector reabrió su servicio en el local hace apenas tres meses, al ser considerado primordial, las ventas no repuntan con la baja afluencia de comensales y los gastos que represento reinventarse para el servicio de entrega a domicilio para llevar en las mejores condiciones y presentación el producto a las casas, contratar personal para la entrega y prepararse con equipo para recibir clientes en la tiendas, dinero que ha salido de la bolsa de los empresarios.
Humberto Ramírez
